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Entrevista a una egresada: Ainhoa Vásquez

Escritora del libro «Feminicidio en Chile: Una realidad ficcionada» (Premio Lector Chile 2016) y editora del libro «Narcocultura de norte a surUna mirada cultural al fenómeno del narco», Ainhoa Vásquez, doctora en Literatura de la UC y actual profesora e investigadora en la Universidad Nacional Autónoma de México, nos cuenta desde el país que ella define como «el centro cultural de Latinoamérica» sus recuerdos universitarios y los desafíos que Chile tiene por delante en materias de violencia de género y narcotráfico.

 

¿Qué es lo que más recuerdas de tu paso por la facultad de Letras UC?

Recuerdo muchísimas cosas, tuve la mejor experiencia. Los cursos eran super interdisciplinarios, había mucha apertura y diálogo en las clases. Tuve una excelente formación que me ha servido hasta el día de hoy porque no sólo me entregaron contenido, principalmente, mis profesores me enseñaron a investigar, me dieron las bases para seguir aprendiendo de manera constante. Pero, creo que si tengo que elegir algo que me haya marcado especialmente es el hecho de que tuve una formación muy transversal y horizontal. Mis profesores decían que nosotros seríamos colegas algún día y siempre nos trataron de esa forma, sin minimizarnos ni infantilizarnos. Eso da ánimo y te inspira porque uno siente que puede llegar a ser como esa gente que admiras. Hoy, que soy profesora, trato de hacer lo mismo con mis propios alumnos, porque aprendí que eso es hacer comunidad.

¿Cómo ha sido la experiencia de vivir en México?

Me encanta vivir en México. Es un país enorme, con tantas experiencias distintas, con culturas tan diversas. Siempre hay cosas entretenidas para hacer porque México es un centro cultural de Latinoamérica. También me gusta mucho dar clases en la UNAM porque prima la diversidad, tengo alumnos de todas partes de la República, también muchos extranjeros y cada quien aporta algo desde sus propias vivencias. Es muy rico porque siempre estoy aprendiendo.

¿Cómo nació el interés por especializarse en el tema del narcotráfico?

Cuando comencé mi tesis de doctorado en la UC yo trabajaba ficciones sobre feminicidio. Yo ya había vivido en México porque en la UNAM hice mi magíster, pero durante el doctorado tuve la posibilidad de ir un tiempo a Ciudad Juárez y descubrí que el feminicidio era bastante indisociable del narcotráfico, al menos en México. Empecé a leer sobre el tema y me fue fascinando todas las aristas que tiene el narcotráfico y sus expresiones, tanto en la narcocultura como en las narcoficciones. Primero me interesó la investigación sobre México y sus cárteles históricos y actuales, pero luego me di cuenta de que en Chile también era un problema con particularidades muy específicas.

¿Cómo ves la situación de Chile frente a este tema?

Lamentablemente Chile es un país bastante propicio para el narcotráfico por varias razones: tenemos una costa tremendamente amplia para el transporte de droga hacia otros países y continentes; también es un buen lugar para el lavado de dinero por las políticas neoliberales que permiten que lleguen capitales de todo el mundo; y hoy Chile ya no es solamente un lugar de paso de la droga, mucha se queda porque tenemos un gran mercado de consumidores de todas las clases sociales. Nos enfrentamos a un problema que irá en aumento si es que no logramos encontrar rápido ciertas soluciones que impliquen, además, no repetir los mismos errores que ha cometido México y Estados Unidos.

¿Qué políticas deberían abordarse de manera urgente en la Nueva Constitución para garantizar la vida libre de violencia contra la mujer?

Hay varios retos todavía en términos de género que debe abordar la Nueva Constitución, las leyes y la sociedad entera. Por ejemplo, resulta fundamental atender a los distintos tipos de violencia que viven las mujeres, tanto en el ámbito privado como público, porque pareciera que el debate se circunscribe al terreno doméstico aún y a la violencia física, y con ello se dejan fuera muchas otras inequidades. El suicidio feminicida, por señalar un caso concreto, es un problema real en el Chile actual y del que muy poco se habla o se atiende como lo que es: resultado de una violencia de género sistemática. También será necesario fortalecer el tema de género desde la misma educación. Una de las cosas que ha traído aparejado los cambios en las leyes en México es justamente los cambios en los programas educativos. Hoy todas las facultades de la UNAM, pero también de muchas instituciones públicas y privadas, en el sistema escolar y universitario incorporaron como materia obligatoria y transversal cursos de género porque se entiende que es un asunto prioritario para lograr una educación integral.

Ejerciendo como profesora en la UNAM ¿Qué consejos le daría a los(as) actuales estudiantes de Letras?

Siempre en la primera clase que me toca darles a los estudiantes de primer semestre les digo que la literatura abre todas las puertas, si es que uno aprovecha las bases que da la carrera. Es una carrera super completa porque te prepara en muchas cosas, en investigación, en redacción, en elaboración de proyectos, en conocimientos de literatura universal, pero también que te permite los cruces interdisciplinarios. Si uno se dispone verdaderamente a aprender la carrera de letras es un trampolín para lo que quieras. Yo tengo compañeros que al terminar la carrera se fueron a otras áreas como la antropología, la filosofía, la educación, el cine, la informática… yo misma no sólo soy profesora de literatura, también trabajo con series de televisión e investigo temas de narcotráfico. Eso podemos hacerlo porque la formación es muy completa. Aprovechen esas herramientas que nos da nuestra formación.

¿Cuáles son tus proyectos a futuro?

En el futuro me veo haciendo lo mismo que ahora. Me encanta dar clases y también investigar. No sé si me voy a quedar en México, porque también a veces me encantaría regresar a Chile, sobre todo ahora que siento que estamos en un momento super trascendental, de cambios importantes a nivel social y político, pero de lo que sí estoy super segura es de que quiero seguir en la academia para siempre.

¿Cómo es el Chile que sueñas?

Libre, igualitario, con equidad de género y lleno de oportunidades para todos.

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