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Entrevista a un egresado: Felipe Rodríguez

¿Cómo poder mezclar la gastronomía y la ingeniería? Felipe Rodríguez, Alumni de la Escuela de Ingeniería UC, luego de trabajar durante años en el mundo de las finanzas, buscó cómo realizar lo que lo hiciera feliz. Hoy, es dueño de la cadena de comida rápida saludable «Tasty Beat» y del proyecto «Cocina País», el cual busca incentivar a distintos actores sociales a aportar colaciones saludables para trabajadores de la salud y a personas que lo necesiten.

¿Qué te motivó a estudiar Ingeniería?

Lo podría resumir así: entender cómo funcionaba el mundo.

¿Y sientes que lo pudiste lograr dentro de la Escuela de Ingeniería?

Diría que no a cabalidad, pero sí entendí de manera muy cercana cómo funcionan varias cosas en el universo que es la Ingeniería.

Consciente de la falta de un espacio que ofreciera comida fresca y con ingredientes de temporada, en el 2013 Felipe Rodríguez fundo Tasty Beat, una cadena de
comida rápida saludable o “fast food”.


¿Cómo nació tu interés por la industria gastronómica?

Después de estudiar Ingeniería me fui a trabajar y a estudiar afuera, a Inglaterra. Cuando volví, estuve trabajando durante cuatro años y medio en un área muy distinta, en distribución de fondos de inversión. Fue ahí cuando empecé a pensar que tenía que tomar la decisión de seguir en el rubro de las finanzas del fondo ficticio, como le llaman, o comenzar a ver qué podía seguir haciendo. Ahí empezó un poco a surgir esta visión, considerando que para mí el mundo de las finanzas es muy atractivo, pero tenía esta idea de involucrarme más con el tema de la cocina. Así fue como salió un poco la idea de tomar esta opción, evaluarla y plantearme: a ver, ¿cuántos cocineros hay de ingeniería? ¿cuántos ingenieros saben de cocina? Pocos. Entonces, ahí encontré una ventana competitiva que se podría ocupar, y de ahí con eso en mente, pasé como seis meses buscando ideas, evaluando proyectos, hasta que llegué a la decisión de fundar Tasty.

Y el proyecto Cocina País, ¿cómo surgió?

Dado que estábamos con las cocinas cerradas, viendo un poco las iniciativas que se están realizando afuera y cómo evolucionaba la pandemia, empecé a pensar en cómo poder ocupar estas cocinas para aportar en algo. Ahí, viendo modelos internacionales en donde la gente compraba colaciones afuera en los restoranes y se les entregaba a hospitales, empezó a salir esta idea de hacer algo similar acá, pero involucrando a las empresas para que pudieran donar materias primas y así el costo de la colación fuera menor.

Las colaciones que se entregan consisten en un plato caliente y saludable, entregadas en empaques 100% biodegradables. Con esto, Cocina País también genera la oportunidad de habilitar nuevamente el trabajo de los cocineros de cada restaurante colaborador, evitando el cierre de las pymes. Hoy, llevan más de 9.500 almuezos donados y han generado más de 300 turnos de trabajo.

¿Qué significa para ti el compromiso social?

Yo creo que es un tema súper importante y en general la gente no se involucra mucho. Siempre hay razones o alguna cosa, pero creo que es algo que debiera estar hoy en día incluido en todos los negocios. De hecho, están súper de moda los emprendimientos sociales hoy en día, pero debiera ser más. Ojalá que todos los negocios siempre nacieran con una patita puesta en lo social. Está bien que no necesariamente puedan desarrollar un área de responsabilidad social, sobre todo cuando uno está partiendo, pero los empresarios se demoran mucho en agregar  la responsabilidad social como uno de los pilares fundamentales. No me refiero a desarrollar actos caritativos puntuales. Además, es algo que las empresas debieran preocuparse de transmitirle a sus colaboradores, a todo el equipo.

Con dos proyectos de emprendimiento liderados, ¿qué consejos le podrías dar a alguien que quiere emprender?

Lo que pasa es que, en esta situación particular, el tema del emprendimiento está súper difícil, es muy riesgoso, pero también se abren oportunidades. He hablado con varias empresas de distintas cosas, que pasaron a vender con el tema de la pandemia diez veces más de lo que facturaban antes. Ósea, hay algunos que están colapsados, desde el que vende mascarillas, alcohol gel y los que venden alimentos.  Entonces siempre salen oportunidades. Ahora, en términos más generales, yo creo que la clave está en hacer lo que a uno le gusta. Yo sé que suena súper trillado, pero creo que realmente es así. Lo que pasa, es que muchos piensan que el emprendimiento es trabajo de lunes a viernes, y que a las seis de la tarde apago el computador y me voy a acostar. No es así. El 98% de todas las ideas que se me han ocurrido están lejos del trabajo, del mundo laboral, y las personas a las que les preguntes les habrá pasado igual. Entonces mucha gente piensa que las ideas se te tienen que ocurrir de ocho a seis y así no funciona.

¿Cómo es el Chile que sueñas?

El Chile que yo sueño debe ser compuesto por una sociedad empática, pero no solamente cuando hay crisis, sino que siempre. Sueño también con que en este país exista mayor confianza. Si me preguntas a mí, ¿por qué cuesta tanto hacer un negocio o emprender? Es por la desconfianza. Nadie confía en nadie; el cliente no confía en la empresa, la empresa no confía en el cliente y el proveedor no confía en la empresa y viceversa. Sueño con un Chile con empatía y confianza, o si no, será muy difícil que podamos realmente ser un lugar de emprendimiento, porque las ideas están, pero llevarlas a cabo en este país es muy complicado.

 

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