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Eligio Salamanca: El primer «Nobel de la Enseñanza»

Entre más de 7 mil profesores nominados, Eligio Salamanca fue el ganador de la primera versión del Global Teacher Prizer Chile 2016, conocido como el «Nobel de la Enseñanza». El ex alumno de Pedagogía del Campus Villarrica UC, lleva más de 29 años como profesor de la Escuela Básica de Quelhue, a 8km de Pucón, en donde su vocación siempre ha tenido un norte claro:  lograr que los aprendizajes estén vinculados a situaciones reales.

A continuación compartimos esta entrevista en Alumni UC.

¿Cómo nace la vocación por la enseñanza?

 En 2° año básico tuve una gran profesora, en un aula multigrado rural, en que estudiábamos compañeros desde 1 ° a 6 ° año básico. Varios de ellos, no sabían leer, escribir  o tenían dificultades en  las operaciones matemáticas básicas y ella me ofrecía  la oportunidad de ayudarle en sus clases a tomar lecciones de lectura, revisar tareas, entre otras actividades. Me encantaba la pedagogía que ella aplicaba y así descubrí mi vocación.


Tú, en entrevistas has dicho que “Profesor no es el que enseña, sino el que aprende”. ¿Qué has aprendido de tus alumnos?

 Eso lo he dicho porque el profesor no debe sentirse dueño de los conocimientos ni del saber. Uno sólo puede enseñar lo que ha aprendido y en ese caso, también se aprende de los estudiantes. Yo de algunos de ello he aprendido, por ejemplo, a enfrentar la adversidad, a ser feliz con lo simple, a soñar en grande, pero cosas específicas también. Por ej. una vez, a raíz de un auto eléctrico de juguete que dos de mis alumnos construyeron con energía eléctrica, ellos descubrieron y yo aprendí cómo se producía el  retroceso con sólo invertir los polos de las baterías.

Cuando ellos han tenido dificultades para aprender, he tenido que buscar y he aprendido estrategias que sin ellos jamás hubiese conocido y eso también se lo debo a ellos.

Has aplicado un método que te llevó a ganar el Global Teacher Prize como maestro. ¿Cuál es el camino que has seguido que te ha permitido conseguir el éxito?

No sé, si ha sido o han sido métodos específicos. Creo más bien que ha sido un estilo, un conjunto de estrategias con las que busco vincular los aprendizajes con la realidad. Que lo que enseño a los estudiantes tenga una utilidad práctica, no sólo de conocimientos, si no de habilidades intelectuales o de pensamiento; habilidades sicosociales y especialmente, actitudes que les permitan desenvolverse adecuadamente y si es posible, en forma sobresaliente en su entorno. Por eso, les he ayudado a producir pequeños libros con algunos de sus  textos literarios y no literarios; les ayudo a aplicar contenidos curriculares en invernadero escolar, uso de tecnología digital, incorporación de su cultura, entre otras. Adicionalmente, me he esforzado en ser para ellos consecuente con lo que les pido: dar siempre su mejor, autoimponerse metas altas, pero que les hagan felices.

¿Qué ha significado para ti (y tus alumnos) ser elegido como el mejor profesor de Chile?

 Para mí ha sido la experiencia profesional más gratificante, la más preciada, porque es el testimonio concreto de lo que les digo a mis estudiantes, que ellos pueden lograr sus ideales, por más altos que éstos sean. Creo que con esto les he dado ese ejemplo con un hecho, que es más creíble que un consejo o que sólo palabras. Buscando siempre tener la mejor escuela y ser el mejor profesor para mis estudiantes, tropecé con ese reconocimiento que nunca busqué.

Este premio es un reconocimiento, pero también una gran responsabilidad.

Algunos de mis estudiantes, al principio sintieron miedo porque creían que me iría y que les dejaría, pero con el tiempo, les he sentido más agradecidos. Sé que se sienten orgullosos cuando ahora cuentan esta experiencia y la asumen como un triunfo de la Escuela también.

¿Qué significó tu paso por la Universidad Católica, y específicamente, por la Facultad de Educación del Campus Villarrica?

 Mi etapa en la Universidad de Villarrica fue una experiencia que marcó mi vida personal y profesional y que con varios integrantes se mantiene hasta hoy. Era una comunidad muy familiar, nos conocíamos todos y casi todos los profesores tenía muy clara la misión que tendríamos a futuro en las Escuelas y eso nos la transmitían. La UC de Villarrica tiene un sello que inculcaba y espero que siga inculcando a sus estudiantes, la marca de una pedagogía ligada al trabajo comunitario, a la tierra o la ruralidad, a la generación de redes, a la incorporación de la cultura mapuche, a la formación integral. Mucho de ello, ha forjado mi esencia

¿Qué consejo le darías a quienes están estudiando Pedagogía actualmente? ¿Alguna recomendación?.

 Que han elegido la profesión más importante del mundo, la que amerita entonces  tratar de hacer siempre las obras más importantes del mundo, aunque no sean siempre las más reconocidas. Que los cambios que ellos esperan y anhelan, pueden iniciarlos en los estudiantes. Que una clase siempre puede ser un impulso para formar, mejorar,  transformar o mantener una trayectoria de vida y depende de nosotros- los profesores- que ello pueda ser para bien o para mal.

¿Recuerdas alguna anécdota de tu época universitaria?

 Recuerdo varias. Éramos bien traviesos para la edad de esos tiempos. Cuando estábamos en clases y alguien pretendía salir de la sala, todos quienes estaban en los pasillos comenzaban a tomarle de la ropa, impidiéndole salir. Una vez, con un hilo de pescar amarramos la cortina cercana al escritorio del profesor, entonces en plena clase tirábamos o soltábamos del hilo y la cortina se abría o se cerraba mágicamente.

Las clases con Sor Clara se iniciaban con adrenalina, porque siempre ella recorría la nómina de alumnos, nombrando en voz alta y de pronto se detenía en uno y a éste le correspondía interrogación oral y eso provocaba una calificación. Todos cruzábamos los dedos para no correr la suerte de ser interrogados. Con ello ella conectaba la clase anterior con la siguiente.

¿Cuál es tu opinión sobre los cambios que se han implementado en la carrera de Pedagogía, específicamente con la nueva Carrera Docente como parte de la Reforma Educacional?

 Para ciertos profesores ha significado un avance en cuanto a mejoras salariales y yo estoy consciente de eso, aunque en mi caso, que ya tenía AEP y AVDI, no me significó un incremento tan notorio. Sin embargo, creo que la Carrera Docente debe ir más allá que eso. Quedaron muchos puntos sin resolver: el agobio laboral, entendido como todas aquellas tareas que debe asumir un profesor o las escuelas y que son ajenas al rol pedagógico propios de la labor educativa; el tema de la deuda histórica;  la estabilidad laboral,  las condiciones de retiro y jubilación de los profesores, el mejoramiento de los planes de formación docente, eel reconocimiento y promoción de perfeccionamiento docente y el incentivo a la  innovación pedagógica, etc. Son muchos temas que la Carrera Docente no incorporó y que eran claves para avanzar hacia una educación de calidad.

No olvidemos que para tener una educación de calidad, todos los elementos que la componen deben ser de calidad: los actores, los tiempos, los procesos, los recursos, etc.

Por último, ¿Cómo es el proyecto educativo ideal para Eligio Salamanca? ¿Cuál es la educación de sus sueños para las generaciones venideras?

 El Proyecto Educativo ideal debe ser pertinente, contextualizado y significativo para quienes participan de él.  Esto significa, impartir procesos educativos que respondan suplir necesidades de aprendizajes para resolver problemas contingentes. Por ej. Es pertinente una educación ambiental en la actualidad, para revertir el calentamiento global. Es conveniente contextualizar las prácticas educativas, ya que se aprende lo desconocido a partir de lo conocido, por ejemplo y es ideal hacer significativos los procesos educativos, porque nada desmotiva más, tener que aprender algo sabiendo que será inservible.

Creo que es necesario desarrollar en los estudiantes habilidades para el presente y el futuro: habilidades blandas, de pensamiento y socio emocionales; competencias comunicativas para desenvolverse en un mundo globalizado, a través de las tecnologías de información, el idioma inglés como herramienta global; la tolerancia, la paz, la innovación y el emprendimiento, por decir algunas.

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